Un paso a la vez, todos juntos.

«El que Deportivo Independiente Medellín haya clasificado primero no quiere decir que sea mejor que nosotros» dijo Fabián Sambueza en la primera rueda de prensa posterior a la clasificación lograda el pasado fin de semana. Es claro el sentir y el deseo, estamos «mano a mano».

Y, así como la tiene clara el volante argentino, así mismo la tiene el profe Yepes cuando aseveró: «Con el Medellín no hay misterios. Confío plenamente en lo que tengo«, cosa que deberíamos hacer todos, más en una instancia en donde lo que se hizo queda en la estadística y todos, salvo las localias, partimos en igual condición. Es a todo o nada, un paso a la vez todos juntos como hace un año.

Regresar a las semifinales es el despertar de la ilusión misma que con los resultados de Copa y la salida de Pecoso estaba dormida, quieta, apagada. Los goles han regresado, la seguridad y el orden son la constante en un equipo que partido a partido marca un  ritmo diferente y se acerca, con más fútbol, a lo que Yepes y la hinchada quieren.

Llegar a la final de la Liga Águila es el último de los tres objetivos trazados para el semestre por Álvaro Martínez, el comité ejecutivo y el plantel del Deportivo Cali. Los dos primeros no se cumplieron y no solo eso sino que se puso en juego el prestigio de la institución al perder por goleada la Súper Liga y salir eliminados, en la forma en cómo se hizo, en primera rinda de la Copa Libertadores.

Llegar a la final, sin embargo, no salvará un semestre lleno de decepciones, lecciones aprendidas y uno más en el camino de formación para los muchachos, no, llegar a la final será indicador de que estamos, como es el deber del Cali, para pelearle al que sea y como sea, «duélale a quién le duela» pues, como equipo grande debemos ir siempre con toda, por todo. Hablemos del titulo, eso seguro nos ayudará a equilibrar la balanza, celebraremos, incluidos aquellos que decían (poseídos por el borreguismo y el melao) que no debíamos clasificar.

Empezamos entonces de nuevo el camino. Un paso a la vez, todos juntos, los de siempre y los que llegan a las finales. Iremos paso a paso pero esta vez queremos pasos grandes, pasos seguros, pasos indomables. Pasos de campeón. Tenemos con qué, claro que si, es una nomina joven pero llena de talento, una nomina que lo que busca es hacer fútbol, regularse y entregarse. Una nomina que pide, como todo el año, el acompañamiento de su hinchada y de que creamos, como lo hace Yepes, su cuerpo técnico y comité, en ellos.

Sé, hablo por mi, que los muchachos están ahí con nosotros, para nosotros, que les duele la tribuna vacía, que les molesta equivocarse y que quieren dejar atrás el semestre, no para olvidarlo, sino para cambiar esa historia que escriben en cada partido por una con un final diferente, uno digno de la institución que representan. Es hora de probarlo.

Es posible que Nicolas Benedetti pueda ser tenido en cuenta en estos juegos. Borré, Mera, Banguero, Mojica, Kevin Balanta y Rivera debarán cuidarse de la quinta amarilla y todos, absolutamente todos, deberán estar concentrados en entregar lo mejor de si, equivocarse lo menos. Hablar en la cancha y darnos, como sé que ellos quieren, motivos para celebrar, para abrazarnos y, paso a paso, llegar al punto en que podamos gritar, como hace un año, «campeón, Cali, campeón». Podemos.

En el camino el primer peldaño es el Medellín. Abrimos con el líder del campeonato, los de Leonel no pierden hace nueve partidos, vienen jugando muy bien y son, sin duda, un rival de cuidado. Pero, a diferencia suya, no tenemos el fantasma de un titulo perdido recientemente.

En casa, en Palmaseca este jueves desde las 18:00 (horario para beneficio de Dimayor y WIN, no del hincha) empezamos de nuevo, de cero, mano a mano. Sé que podemos, sé que queremos, ¿entonces? ¡Vamos hacerlo carajo!

Nos vemos en el estadio, nos leemos por acá

Germán Salcedo Cajiao

@germanchos

*Fotos: Occidente.co y Vizzor Image (Luis Ramírez) para Futbolete.com