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Mario Yepes es un ídolo del Deportivo Cali, de la Selección Colombia y un respetado ex zaguero central en el mundo del fútbol. Se coronó campeón con el verdiblanco en 1998 siendo expulsado en el partido definitivo en una jugada que selló ese campeonato. Llegó al Cali y desde su debut marcó diferencia, su clase, sus quites deslizantes elegantes, su señorío y a la vez brío nos permitieron contar con un lider en el grupo y un bastión en el campo. Ese es ‘Mabeto’ el ídolo, el “oh rey” de la defensa caleña, el inolvidable. Es uno de los Yepes que tenemos, akl que siempre, al menos yo si, recordaremos y respetaremos por lo que es, un gran señor.
El otro Mario Yepes es el ‘Profe’. El profe Yepes llegó al Deportivo Cali a ocupar el lugar que dejó Pecoso Castro tras una serie de resultados demoledores en Copa Libertadores, por no usa otro adjetivo, y con un ambiente entre los muchachos que denotaba un desgaste físico, emocional y mental propio de su estilo y determinación a la hora de ir por los resultados.
Llegó Mario Alberto, una apuesta grande del Comité ejecutivo del Cali pero una apuesta con confianza. Mabeto viene preparado de Argentina e Italia, se ha codeado con grandes figuras y absorbido todas esas enseñanzas. No tiene experiencia, eso es verdad, y de ahí la apuesta a un proceso del que pasamos de un equipo en formación a un equipo campeón, golpeado pero maduro que recibió a un DT en crecimiento. Mario puede, pensé, es un líder, siempre lo ha sido, pero no, ese es el otro Mario porque el Yepes DT dista mucho del Yepes de cortos.
Rápidamente, Mabeto no ha logrado configurar un once ideal. Los ensayos resultan siempre en la misma figura. La entrega de Sambueza y la conexión casi natural de Benedetti con Candelo. Uso varias parejas de centrales, implemento la rotación, aterco con Aquivaldo y Abel, en bajo nivel, recompuso. El equipo no tiene gol, genera ocho, nueve aproximaciones pero no concreta. Aquí, en este punto es donde necesitamos al mariscal Yepes, al capitán, al lider. Aquí es donde se prueba el material del que están hechos tu pecho y entrepierna, no hay un mañana diferente al hoy, al ahora, porque el tiempo, desafortunadamente se nos acabó.
Al llegar Alvaro Martínez fue, como siempre lo es para beneficio de la institución, muy claro: Queremos cupo a copas internacionales y para eso al técnico todo se le dio. Para lograr esos cupos no hay de otra, salir campeón de Copa Águila, para la Suramericana y llegar ala final de Liga Águila, ganarla, para la Libertadores. Ambos objetivos abrazados con ilusión por la hinchada, ambos objetivos firmados por Mario Yepes.
En la noche del miércoles 31 de agosto uno de esos dos objetivos no se cumplió. Fuimos eliminados por el Deportes Tolima en desempate desde el punto penal tras haber llegado a la vuelta con una ventaja de dos goles y, según la radio porque no tuvo señal de TV, un buen desempeño en el campo. ¿Y entonces? ¿Cómo jugando bien perdés una diferencia de dos goles? En fin, empezar a descabezar a cada jugador o señalarlos me llevaría un tiempo que, francamente, en este momento prefiero no invertir.
50% del objetivo se perdió y en el rendimiento, balance de puntos logrados sobre puntos disputados, el Deportivo Cali armado por y para Mario Yepes con una significativa inversión no logra resultados. Estamos, a vuelo de pajaro, por debajo del 30% en ese rubro. ¡30%! para semejante inversión, Dios.
Es un proceso difícil de entender porque uno espera que con el pasar de los entrenamientos y partidos al menos se vea algo diferente, un crecimiento, algo mejor. Veo lo mismo de hace un par de partidos solo que ahora se muestran más Roa y los arqueros que Sambueza y los arqueros. Seguimos sin gol, seguimos sin resultados, se nos va, se nos va.
El proceso iniciado con Mario Yepes requiere, con urgencia, un apoyo extra. No solo en la parte emocional y mental de los jugadores sino en sacarlos un poco de un conformismo que ya llego al limite del descaro. ¿A ninguno de estos profesionales les duele no lograr resultados? Increíble que sigamos con el “estamos trabajando”; “sabemos que no andamos bien”; “la ansiedad nos juega en contra”; “Valoramos el esfuerzo y la seguidilla de partidos”. ¿En serio? ¿Dónde está el lider avergonzado que, de frente y sin miedo sale a la hincada excusarse y de verdad firmar con sudor un compromiso y darle vuelta a todo? Tocamos fondo.
Hay dos Mario Yepes, dos ‘Mabeto’ en el Cali y en este momento tenemos uno pero necesitamos, con urgencia, al otro; de lo contrario ambos serán pasado cuando pueden, y deberían, ser muy buen presente para un gran futuro.
Vamos Cali, que los muchachos prueben su valía y que Mario Alberto sienta de nuevo la emoción, acepte que tiene carencias y deficiencias y se apoye con la gente que hay en el club, hay material, hay con qué. Hora de alejarse de la soberbia.
Vamos Cali, acá estaré siempre con y para vos porque, Cali somos uno y nos duele a todos.
Nos vemos en el Estadio Deportivo Cali y nos leemos por acá
Germán Salcedo Cajiao
*Foto: Futbolred.com y Elpais.com.co
Tienen 4 partidos de visitante, 3 son tremendamente ganables y el otro es santafe pero no es el campin. Yepes, no jodas mas, ahi esta la clasificacion. Ganando lo de casa mas lo de afuera, minimo hay 20 puntos facilitos.
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Para los que hablan de un Cali grande les diré que lo fue pues hace mucho tiempo que se juega por ser 8 y por vender jugadores y los que llegan jamás se comprometen con el equipo caso Marrugo, Mosquera(quien solo vino a robar al cali) y muchos otros que rinden pero no para el Cali es triste pero cierto
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Yepes es una gran persona y fue un gran futbolista, pero a cometido 2 errores muy graves: 1. retirarse muy tarde, debió hacerlo 3 años antes, los últimos años se arrastraba. 2. meterse de técnico muy rápido, no se había preparado y menos para hacerse al frente de un equipo grande como el Cali. Mario debe aprender a manejar mejor sus tiempos, debió empezar a prepararse hace 4 años cuando debió retirarse. Pienso q puede enderezar su camino, prepararse, hacer escuela, empezar mas abajo.
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El problema de Yepes es que es en extremo conformista, y lo ha transmitido a los jugadores. Le falta muchísima ambición. Esperemos que eso cambie por el bien de todos
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