JUNIOR, rojo de la verguenza

JUNIOR 1, AMÉRICA 1
Sin un juego de conjunto definido que por momentos lució lánguidos, el Junior pidió pasaporte para entrar en un ridículo futbolístico. Errático y desordenado fue el timón que dirigió a los Tiburones en su cancha repleta de entusiasmo en las gradas pues la ausencia de público, esta vez, se repite fecha tras fecha como una medida diluida en una vaga tradición pues ya se enmarca como un cliché constante.
Una nómina titular en su mayoría con la buena reaparición de Viera quien lució bien, con un Fawcett apagado, un Jossimar lento y un Giovanni perdido y complicando, algunas veces el medio campo, pues no surtía balones como en las buenas otras veces.
Un resultado que elevó al Rojo americano a un conjunto afortunado pues un punto le cayó muy bien. Destaco el conjunto tulueño con un uniforme muy bonito, que manejó, coordinó y protagonizó muchos pasajes de los 90 minutos.
Por ejemplo, el Junior pierde en el primer tiempo protagonismo. América se monta y Junior se pierde en un juego sinsentido pero una luciérnaga en el cielo barranquillero, sin lechuza a bordo por lo menos visualmente, iluminó una jugada de Barahona y Bacca la culmina con una joya tobillera de esas que el porteño nos tiene acostumbrado; fue el mejor momento de Junior pero ya, hasta ahí.
Como contrapartida Junior se entregó a un América que lo empalideció pues el cambio de uniforme para la segunda etapa favoreció a los rojos que marcó un golazo de corte carioca; extraordinario gol de un empate anunciado y despreciado por nuestra fanaticada.
No deseo referirme más al trabajo debilucho que viene haciendo el equipo en el torneo local; no deseo referirme tampoco al trabajo complicado y prospectivo que viene haciendo el equipo en manos de Quintabani.  Y también, porque ya lo dije antes, el partido de Junior en Brasil contra el Gremio, será, a mi modo de ver, el examen definitivo de los tiburones en la Copa Libertadores. Porque el Real Cartagena, Gremio e Itagüí encuentros-rivales que se avecinan son duelos-evaluativos para un Junior que se muestra más como un equipito sin valentía, debilucho y no-convincente.
Me parece que América pensó más en los tres puntos que Junior, así lo constata la noticia de eltiempo.com en futbolred.com: «…América se dio cuenta de que podía aspirar a los tres puntos,…» (En un apretado partido, Junior y América empataron 1-1″; verlo en la dirección: http://www.futbolred.com/liga-postobon/noticias/fecha8apertura2011/en-un-apretado-partido-junior-y-america-empataron-1-1-/9075620) y creo que Junior a pesar de que mostraba intenciones, éstas, constituían el desorden en que se mueve su estructura de juego y su función de equipo aguerrido y alegre que suele o solía ser cuando jugaba en el Metro.
¡Qué preocupación! es este Junior del 2011 de Quintabani & Cia.
Chulespe volverá con su expectativa arreglada y una expectativa decorosa pues todavía confía en un buen papel de Junior. No es para tanto me decían algunos hinchas, fresco, nos toca aguantar y aguantar y esperar su mejoría.