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Leonel es, sin duda, el mejor técnico de la historia del Medellín, al menos en mi percepción. Pero los partidos internacionales siguen siendo su deuda, así como en la Libertadores del 2010, en los últimos dos encuentros de visita se ha cambiado el módulo habitual y hemos recibido cinco goles en dos partidos.

Fotografía de DIM Oficial Fotografía DIM-Oficial

El rendimiento de Leonel Álvarez es, aproximadamente de 58.6% de puntos obtenidos dirigiendo al Medellín. Es el único técnico bicampeón con el Medellín y lo ha hecho en los dos últimos títulos. Tiene un estilo de juego claro, con un volante ’10’ como Marrugo que dirige los hilos del equipo, duerme al rival con el toque y sorprende con un balón largo y que termina siendo gol. Pero ¿Y cuando falta ese volante de creación? Ahí comienzan los problemas.

La decisión de jugar con cuatro defensas centrales en la línea de fondo en Paraguay ante Luqueño fue controvertida. Marlon Piedrahita, habitual lateral derecho del equipo, jugó más adelantado y sufrió en esa posición. ¿El resultado? Dos goles por cero y un sufrimiento inmerecido para el buen fútbol que había mostrado el rojo en el Atanasio Girardot. Las lesiones comenzaban a hacer mella y Leonel, en vez de jugar con jugadores en posiciones habituales, comenzó a revolver la nómina.

A Santa Cruz se le ganó con cierta comodidad de locales y se viajó a Recife con una diferencia buena de dos goles, pero le bastaron 30 minutos al equipo brasileño para derrumbar todo el planteamiento de Leonel. Elacio Córdoba, quien viene de una lesión y no ha actuado mucho esta temporada, fue el atacante por derecha, y la creación estuvo a cargo de ‘Mao’ Molina, quien no sabe ser volante ’10’ y generó un hueco inmenso, del tamaño del agujero en la capa de ozono, que Santa Cruz aprovechó con facilidad.

El partido solo se pudo solucionar con el ingreso de Marrugo en el segundo tiempo. Un segundo tiempo que quedó 1-1 y le brindó el pase a cuartos de final al Medellín. Si la magia está en el banco, no se le puede dejar allí y experimentar con jugadores que no vienen jugando regularmente. Lo del caso Saiz-Pertuz y Arias-Mosquera prefiero dejarlo abierto, no entiendo por qué los centrales campeones están en el banco y cada partido se sufre con esta pareja de centrales que viene jugando. Pero Leonel es el técnico y puede tomar esas decisiones.

Llegó la hora de jugar como en la liga colombiana, donde Medellín impone condiciones de visitante y suma buena cantidad de puntos. Las copas internacionales se ganan jugando de visitante, dando golpes de autoridad y complicando a los rivales grandes en su casa. Medellín debe salir a jugar en cualquier estadio de Sudamérica con el rótulo de campeón de Colombia y no con alineaciones que lo único que denotan es el deseo de intentar soportar y aguantar la ventaja obtenida en casa.

El ‘rojo’ juega sabroso de local, gusta y encanta. Pero debe mejorar sus registros de visitante, o su actitud, pues el único partido que necesitó ganar de visita lo ganó cómodamente en Ecuador ante la Universidad Católica, de resto, cuando ha llegado con ventaja, ha sufrido más de la cuenta. Hay que revisar eso.

Esto, obviamente no es un ataque al técnico más ganador de la historia del rojo y a un crack que está en el olimpo de los ídolos del ‘Medallo’. A un león que se hizo famoso por su forma de dirigir con el alma, de sacar a su equipo de miles de dificultades y de llevarlo a ser campeón. Pero si hay asuntos que se deben revisar, y más porque en verdad sueño viendo al Medellín siendo el campeón de la Copa Sudamericana, y sé que con buen trabajo, es más que posible.

HAY QUE CONVERTIR EL ATANASIO EN UNA CALDERA ANTE CERRO PORTEÑO. ¿TANTO PEDIMOS COPA INTERNACIONAL PARA RESPONDER CON ESAS PAUPÉRRIMAS ASISTENCIAS? ¡A LLENAR EL ATANASIO, CARAJO!

Sergio Andrés Ruiz López

Seguime en Twitter: @SergioRuizL

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