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Victoria
sensacional y bien lograda la que propinó Atlético nacional en la cancha de
Deportes Tolima, que se ha venido convirtiendo en el gran infierno y donde
justamente habíamos salido goleados en la fase inicial por 4-0, la que hasta
ahora ha sido la peor vergüenza en la era Osorio.
Un
primer tiempo donde Nacional fue el mismo equipo pasivo, sin opciones y sin creación
de juego en el medio campo principalmente, aunque por momentos salió a
presionar en el área rival y arriesgó en varias oportunidades con Sherman como
protagonista, pero no fue claro en la transición defensa – ataque y fue
precisamente cuando al empezar el segundo tiempo, un error de Juan David
Valencia generó un contragolpe letal y un gol en contra que sepultaba
completamente la ilusión de llegar a la final, pero el cambio de actitud, los
deseos de ganar, el buen fútbol por los costados y los cambios determinantes
por Juan Carlos Osorio, dieron resultado y bastó con un golazo de Juan David
Valencia y Jefferson Duque para ganar el partido más complicado en estos cuadrangulares
y volver a soñar con una final, que no se puede volver a dejar escapar como
hace 6 meses, y protagonizar una final soñada por muchos hinchas del país,
entre Nacional y Santa Fe o Millonarios o, incluso, Cali, todos con opciones
para estar en el partido definitivo y luchar por una nueva estrella.
Una
victoria que nos acerca pero que tampoco nos puede permitir tomarnos confianza,
porque los 4 equipos tienen opciones de clasificar sin depender de resultados y
de seguro veremos partidos abiertos y con muchas opciones de lado y lado.
Victoria
que tampoco nos puede enceguecer, porque es bien sabido que la hinchada tiene
muy claro quién debe irse al terminar el campeonato, porque un jugador profesional
y que tiene todas las comodidades y beneficios económicos como los que hay
Nacional, debe exponer lo mejor de sí, y mínimamente esforzarse y luchar en la
cancha como un autentico gladiador y no como un cómodo y cínico burgués.
Por otro
lado, destacable la labor ofensiva de Juan David Valencia y Stefan Medina,
justo cuando Osorio recompuso las fichas en el campo y dejó una línea de 3
defendiendo y arriesgó todo por ganar y si que dio resultados en un momento
definitivo.
Se
viene de nuevo un partido determinante y la invitación a todos los hinchas para
acompañar el próximo jueves al equipo y alentar los 90 minutos que le permitan
a jugadores y cuerpo técnico sentir el acompañamiento y el aliento de la
hinchada, esperando que ese día el supuesto miedo escénico que afecta a los
jugadores no se apodere de ellos y los vientos de eliminación no lleguen esta
semana, justo en la ciudad y ante miles de hinchas que acompañaran al equipo a
ver una victoria y no una deshonrosa derrota como la evidenciada la semana pasada
ante Itagüí, que ha cumplido el objetivo del semestre al ganarle a Nacional, y
de seguro la ansiedad de los jugadores de las Águilas Doradas se empieza a
apoderar de ellos por jugar próximamente con Nacional al cual desean ganarle y
eliminarlo de la final, así terminen ellos en la cola del grupo.
Finalmente,
hay que resaltar que cuando el equipo quiere y demuestra sentimiento y amor por
la camiseta para ganar se consiguen grandes objetivos, porque la hinchada no
les exige tampoco 100% rendimiento técnico, pero si por lo menos sacrificio y
responsabilidad en el campo de juego, aspecto con el que muchos equipos han
alcanzado grandes metas.
Próxima fecha:
Nacional
– Tolima: Jueves 27 junio: 8:10 pm Win Sports (4 fecha)
FORO DE OPINIÓN
¡¡¡Opiniones y reacciones de la victoria ante Tolima!!!
REFLEXIÓN:
¿Es Macnelly Torres intocable en Nacional, y acaso Juan
Pablo Ángel merece ver los partidos desde la tribuna?
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