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El
parafraseo de Germán Espinosa, gran novelista cartagenero, sirve para rendirle
un homenaje al equipo de la Costa Atlántica colombiana que da la alegría de
campeonar en este aguerrido rentado. Junior ganó su sexta estrella, después de
derrotar al bogotano La Equidad, 3 goles a 1, en el encopetado Meléndez con más
de 60 mil espectadores. Junior es el nuevo campeón del futbol colombiano,
corona que lo lleva y lo instala en un signo de la alegría y de lucha, es
decir, constituye y representa un ejemplo de lo que significa la victoria para
un pueblo costeño que ama el futbol.

El
ganar o el vencer, el Junior lo representa. ¡Sí! lo hace para las comunidades
jóvenes que ven en este emblemático equipo, un valor de la sociedad y de la
cultura, en el que inclusive, alcanza significaciones e innumerables y
positivas interpretaciones de lo que es capaz un colectivo de la región:
construir como humanos, cumplidos propósitos que engalanan la piel Caribe, el
alma Caribe, las esperanzas de una cultura tan diversa que compone esta
Colombia hermosa.

Junior
supo encuadrar con un futbol «raro», vistoso por momentos, práctico en la
mayoría de las veces, débil en otras, enjuagarse de valentía y de constancia
para vencer en sus gestas. Un técnico que fue un gran jugador, supo con sapiencia
transmitirle a un manojo de seres humanos, lo que se suponía era estar en la
gloria, y así lo hizo. Umaña es un buen comunicador, porque los lecciones que
le dio a Bacca, a Cortés, a Ruíz, a todos, era que había que presionar, había
que recuperar el terreno y la bola que le había prestado durante más del 60% al
equipo verde. Y así lo hizo, Junior y sus hombres se fueron arriba y retomaron
el partido, y había que estar en las rayas del peligro para indicarle al equipo
rolo que era posible perder en el Metro. Y así fue. Bacca estaba ahí para
presionar con exactitud obligante, porque un pie como el de Bacca, significaba que
el futbol es el juego más artístico y azaroso, el juego más arriesgado en donde
el peligro, se construye sólo con las intersubjetividades y las espontaneidades
de quienes lo diseñan en el campo de juego.

Y
así fue. Un Junior que alienta la economía, los hogares, la gastronomía, las
ideas de progreso, los amoríos, la mente de los niños por hacer deporte, el
comercio y la buena onda en los hogares costeños y de algunas ciudades
colombianas. Porque este Junior no es sólo de la Costa Caribe, hay en Colombia
fanáticos que viven y gozan al Tiburón y no viven en las sierras, playas y
sabanas del Caribe inmenso. Este es un equipo que sirve para generar una
ideología del desarrollo y una perspectiva de Región vanguardista.

Así
es nuestro Junior, un ejemplo de artesano, de lucha, de formación, de país de
avanzada. Por eso, es el Tejedor de Seis Coronas.

Ofrezco una breve síntesis de los titulares que se fueron «tejiendo»
previo al partido final. Se reproducían en manos de un periodismo -obviamente- anexados
al equipo bogotano; creo que fue un ambiente armado que menospreciaba a Junior
como campeón y daba por «seguro» a La Equidad como el favorito porque atendían
más a la estadística tradicional y regional, como en las votaciones
presidenciales que daban a Mockus como ganador, y bueno… aquí reproduzco
algunos:

·    
Pasó con Mockus, no pasará con La Equidad…

·    
«Esperamos que no pase nada
extrafutbolístico en la vuelta»: Viáfara

·        
A Ibagué tenían que ir a buscar el partido,
ahora tiene que ir a defender el resultado, ¿Se le duplica el trabajo a
Equidad?
J.V. «No, yo creo que no. El trabajo va a ser para ellos pues va a ser
difícil que nos ganen por el planteamiento que vamos a hacer nosotros. Además,
ellos tienen la presión de haber perdido dos finales en Barranquilla y la gente
no les va a aguantar otra más».

·     Siempre
el equipo que pegó primero en la ida de la final, salió campeón

·        
La tendencia se ha mantenido a lo largo de los
16 torneos cortos disputados desde 2002. ¿Será Junior capaz de revertir esa
estadística en la final del Apertura 2010?

·        
Desde que se juega campeonatos semestrales el
equipo que ganó o empató de visitante en el partido de ida de la gran final,
siempre se coronó en el juego de vuelta.

·     «No
vamos a ir a guardar el empate, ni a manejar el marcador»: Nelson Ramos

·        
Esta expresión es de un
aficionado: «Burrior tu papa – junior tu papa, mama solo hay una papa puede ser
cualquier hijue#### esos corronchos perezosos mamaburrr#s no ganan nada, esa
vaina estan muy picados y sobradores como siempre, equidad lo mejor campeones,
un equipo que da ejemplo en colombia y en especial en bogota donde los petardos
de shandafe y malosnarios nunca hacen ni m….. equipitos de pacotilla que no
tienen historia sino prehistoria este siglo no se han y ni se dejaran ver con
nada, que pesar con sus hinchitas, vamos equidad campeón».

Me da gusto, pero también tristeza que utilicen a la palabra para
violentar y para mostrar sus equivocaciones. Hoy Junior es el campeón de
Colombia. Hoy Colombia y la Costa Caribe gozan y dan ejemplo de progreso. Hoy,
es el del Junior de Barranquilla.
Hoy, vivirá la Costa otra historia,
de amor claro. Y eso es una gran ganancia para un pueblo acostumbrado a sufrir,
como otros pueblos colombianos. Hoy Junior entrega amor.

Chulespe volverá.

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