Agosto 2 de 2008  

Por Azzurro

Este torneo puede parecer como uno más. Puede parecer como el comienzo de una nueva ilusión en la mente de los hinchas azules. Los torneos cortos tienen la ventaja – o desventaja- de hacer olvidar rápidamente los triunfos o derrotas de los torneos que terminan. Sin embargo, me parece que este torneo es clave. Me parece que el torneo del segundo semestre de 2008 no es un torneo más para Millonarios.

Este Millonarios es tal vez el Millonarios más costoso de los últimos años. No hay margen para el error. La administración ha decidido jugarse el todo por el todo: vencemos o morimos. Creo no exagerar al decir que si Millonarios no tiene un resultado positivo este semestre, el gran avance financiero logrado en los últimos años (pago de la deuda, compra de jugadores, pago cumplido de sueldos, etc.) se vendría abajo. Pareciera como si la dirigencia viera en el título la única forma de cerrar con broche de oro la recuperación administrativa del Club y que para conseguirlo se la haya jugado por la fórmula de mezclar juventud y experiencia, así esto signifique tener un número demasiado alto de jugadores prestados y no propios.

Por otro lado, es clarísima la distancia que existe entre la hinchada y los dirigentes azules. Este se vuelve un factor también determinante en este torneo que apenas comienza. La credibilidad y margen de maniobra de los dirigentes son demasiado bajos. La época de luna de miel con los hinchas terminó. Si bien muchos aún le reconocen a la dirigencia la labor administrativa gracias a la cual se salvó financieramente al Club, la falta de logros deportivos a minado por completo su credibilidad. Esta falta de conexión entre hinchas y dirigentes puede ser fatal para el Club.

Millos es un equipo que vive de sus hinchas. Las taquillas son el elemento que le da aire a las arcas azules cada mes. Son recursos que se utilizan casi exclusivamente para pagar a los jugadores y asegurar el funcionamiento del Club. Lo de los patrocinios sirve para comprar jugadores y salir de «chicharrones». Una hinchada alejada de la dirigencia es una hinchada que sin resultados inmediatos abandona las graderías. Es claro que en esta situación, cualquier resultado negativo afecta con mayor fuerza la asistencia al estadio, y esto tiene un impacto directo sobre la viabilidad económica del Club. Peligroso.

En la parte deportiva, se ve una nómina titular interesante. Es evidente que línea por línea, Millonarios tiene jugadores que hacen la diferencia y que bien dirigidos pueden aspirar a cosas grandes. El problema parece estar más que todo es en la falta de alternativas. Un equipo tiene que tener no solo una nómina titular fuerte, sino variables que le permitan sorprender a su rival y además variantes que reemplacen a los titulares cuando éstos no puedan estar. Hoy día las variables son: Pérez, Mendoza, Cortés, González y todos los de las menores. Millos parece estar corto de variables de peso, sobretodo en la línea de creación.

Los partidos que hemos visto hasta ahora -solo pude ver el primero contra Medellín gracias a la hospitalidad de mis amigos Pablo Medina y Leopoldo Fergusson en EE.UU., quienes a Dios gracias están suscritos a Gol TV y a la de Querubin y Sahar- dejan algo de ilusión y desilusión a la vez. La victoria en Medellín debía completarse con otra contra el Cali. Por comentarios que he recogido de hinchas amigos, parece que hay ilusión y que este equipo gusta, pero también hay afán de concretar resultados que necesitamos lograr si o si. Pareciera como si ya nos hubiésemos acostumbrado a que Millonarios no nos puede dar felicidades completas. En ese sentido, amigos, es clave apoyar. Siempre lo he dicho y siempre lo diré. Sin el apoyo de la hinchada Millos no tiene muchas opciones. Además de la mala prensa, la ansiedad de los hinchas siempre afecta el resultado final.

Entendamos lo que está en juego. Un mal semestre puede tirar a la caneca todos los avances administrativos que hemos logrado en estos años. Los dirigentes han hecho su apuesta: mezcla entre juventud y experiencia, inversión importante en jugadores prestados, sostenimiento de jugadores que vienen jugando juntos hace años (Robayo, Estrada, Bedoya, Cuadrado, Cortés). Este semestre puede ser el del respiro, el de la gloria o el del final. Una no clasificación a los cuadrangulares dejará a Millos en una situación muy similar a la que presentaba hace 4 años. Clasificar nos dará aire, pero no el suficiente. Llegar a la final será el reencuentro de la ilusión y la alegría. La grandeza de Millonarios necesita una alegría y mucha ilusión.

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Noticias

Para mañana se tiene casi confirmada la nómina titular. Solo Bedoya está en duda. Con Bedoya Millonarios jugaría con: Cuadrado; Rojas, Hurtado, Mera y Casierra; Bedoya y Robayo; Estrada y Araújo; Rodríguez y Castro (buen arranque el de Castro, me han comentado). Sin Bedoya el cambio sería de Mero por Cortés en la defensa y el hueco de Bedoya sería cubierto por Mera. Aparentemente, Quitabani se la quiere jugar a fondo con Mera.

Por otro lado, el partido de Millos contra el Barcelona de Guayaquil está confirmado en la ciudad de Toronto. Viajará una nómina mixta, reforzada por Oscar Córdoba y Gerardo Bedoya. Este partido se hará el 8 de agosto. Millonarios jugará el 10 en El Campín contra el Tolima, con todos sus titulares.

Finalmente, les cuento que ya estoy de regreso. Por lo tanto el blog volverá a actualizarse periódicamente.

Vamos Millos.

La gloria del pasado, vive en el Futuro.

Azzuro