Más allá de que el conjunto local haya sido derrotado por la mínima diferencia, el partido jugado en el Metropolitano entre sudamericanos y europeos deja como grandes ganadores a Barranquilla, a Junior y a su hinchada, quienes hacía mucho tiempo no recibían un visitante de tal envergadura.
A pesar de la derrota, no me pareció malo el partido de Junior. El fútbol europeo le lleva un paso gigante al sudamericano y a pesar de esto, Mónaco no pasó muy por encima de Junior, que estuvo incluso cerca de lograr la paridad del juego.
La defensa rojiblanca promete mucho; a Sebastián Viera, Andrés Felipe Correa, William Tesillo (de quienes ya conocemos su gran nivel), se sumó el central paraguayo Nery Bareiro, quien al igual que sus compañeros, no mostró complejos a la hora de enfrentarse a una poderosa ofensiva europea comandada por Berbatov, Ocampos y Carrasco.
Todos los ojos de los hinchas rojiblancos estaban puestos sobre Roberto Ovelar, y no era para menos, el delantero guaraní vino a ocupar una posición en la que han estado Iván René Valenciano, Víctor Ephanor, Nelson Silva Pacheco, Carlos Bacca, Teófilo Gutiérrez, entre otros. El paraguayo mostró buen juego aéreo, puede ser más peligroso jugando dentro del área y no tan lejos.
Un hecho bochornoso fue el abucheo y la rechifla de algunos «hinchas» a Ovelar, un jugador que tiene pocos días de haber llegado, no hizo pretemporada con el club y aún no se encuentra adaptado a la ciudad. Con el transcurrir de los partidos, se podrá decir si se justifica o no su contratación.
Noventa minutos no son suficientes para evaluar cómo llega Junior de cara a la Liga Postobón. No obstante, pienso que este equipo estará mejor que el del semestre anterior. Comesaña conoce más a sus jugadores, así como ellos a él.
Ojalá tengamos más partidos con rivales de este nivel en pretemporadas.
Muchas gracias a todos por leer. Hasta pronto.
Miguel Elías Pumarejo Sánchez.
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