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A pesar de no haber jugado el mejor partido ante Itagüí, Junior sacó su casta (huevos que llaman en el fútbol) y logró clasificarse a las semifinales del fútbol colombiano, donde se medirá ante Millonarios en la búsqueda de un tiquete a la gran final. El optimismo (no confundir con triunfalismo) se ha apoderado de Barranquilla, que se ilusiona con una nueva estrella rojiblanca. 
 
No cabe duda que la mano de Comesaña se ha visto en el conjunto tiburón. Junior dejó de ser ese equipo que jugaba bien veinte minutos, marcaba un gol y se echaba atrás a defender el resultado. El buen juego y el orden táctico se han visto en la mayoría de los partidos; empero, el gran problema ha sido la falta de contundencia y efectividad a la hora de definir, lo cual le ha hecho perder partidos en los que merecía mejor suerte (Por ejemplo, frente a Nacional y Once Caldas). 
 
Y justamente la falta de definición es lo que me preocupa en esta semifinal, dado que la diferencia de goles es la que determina el paso a la finalísima. Para nadie es un secreto que Bogotá no es precisamente la plaza más fácil para Junior, y es por eso que pienso que en Barranquilla, lo ideal es sacar una diferencia mínima de dos goles. 
 
Aunque todos los partidos son diferentes, ya vivimos este año en Barranquilla un duelo entre rojiblancos y azules. En esa oportunidad, los visitantes se impusieron 0-1. Sin embargo, cabe resaltar que el marcador no refleja lo ocurrido en el terreno de juego y que aquel equipo era dirigido por el ‘Zurdo’ López. Esta vez se juega a otro precio. 
 
Me resulta imposible no acordarme de la semifinal del 2011, en la cual contra todo pronóstico, Junior empató la serie que perdía 3-0 y a través de los lanzamientos desde el punto penal avanzó a la final, donde se coronaría campeón. No obstante, el presente es otro y el pasado no juega, esta vez la serie se cierra en la capital, pero esperamos que el resultado final, sea igualmente favorable para Junior. 
 
«Cuando se llena el Metropolitano, el rival ya va perdiendo 1-0», dijo en alguna ocasión el ídolo rojiblanco Carlos Bacca. Ciertamente el apoyo será fundamental en esta instancia definitiva, por eso la invitación para toda la hinchada barranquillera es a llenar el estadio este miércoles. 
 
 
Muchas gracias a todos por leer. Hasta pronto.
 
 
 
Miguel Elías Pumarejo Sánchez
En Twitter: @MiguePumarejo
Correo electrónico: migueleliaspuma@gmail.com

 

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