PEREIRA 1, JUNIOR 2
La sorpresa del triunfo ayer en Pereira, la consideramos así,
sorpresa, pues unos técnicos y un equipo que venía dando tumbos
no podía obtener semejante propina en la Perla del Otún.
Sabemos que nuestra alegría como fanáticos de Los Tiburones
no puede ensombrecerse pues tampoco se trata de comprender
que le hemos ganado a un equipo de racamandaca; pero no se trata
de lanzar los tambores al aire ni de maltratar al Dep. Pereira.
Se trata sencillamente de darle un gran significado a este triunfo por lo que significa (veitetantas fechas sin ganar de visitante); de que Pinto dejó un rastro que Cheché ha continuado y que los cambios efectuados dieron resultado.
Junior no fue más que los Pereiranos. Un primer tiempo en donde el Tiburón diagnosticó la estructura ofensiva del Pereira aguantando exitosamente sus embates; un segundo tiempo, locuaz, aguerrido, atrevido y contundente de parte de Junior pues el Cheché «ingresó» a los goles desde el banco y el equipo se tornó antes y después de los goles, fundamentado; se notó una mejoría en el lenguaje armonioso del del equipo.
Y vimos que el Junior tiene otra actitud. Así, y por esta manera, soñaremos que vamos a consolidarnos como equipo grande y coherente con la historia de lo que significa nuestra divisa.
No fue una gran cosa nuestro juego en Pereira, pero el Tiburón demostró que se puede ser PRAGMÁTICO, que se puede concebir un equipo con ganas y en donde sus estructuras de juego funcionaron, sus defensas que con Verbia cada vez más seguro, solidifica una gran seguridad, junto a Almeida, Andrés y Sergio.
Los medios funcionaron con solvencia y cautela, pues Giio a pesar de que dormido anduvo la primera parte, al ingreso de Wlado y Cortés casi punta-central-ambiguo, con Valencia y Bacca, mostraron un tejido lógico que dio resultados.
Buena por esa. Vamos el miércoles al Metro contra los verdes, indudablemente otra gran equipo.
Una prueba para los jugadores y para Cheché. Y para el público también pues el Coloso de La Murillo
es un monumento sólo cuando tiene su propia voz numerosa de gargantas tiburonas.
Chulespe volverá.
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