Cómo será la
vaina tan chévere que está pasando en Barranquilla, que ves extensas familias
asistiendo al estadio, eso es ejemplo de espectáculo civil, de ciudad que da
ejemplo de grandeza y de globalización urbana y moral. Lástima que los medios no
refieran estos ejemplos que ocurren en Barranquilla y que no se ven en ciudades
como Cali o Bogotá, entre otras.

Un partido
alegre y bien jugado donde se vio el fútbol colombiano actual. Y en esto quiero
remarcar que Junior está jugando el mejor fút,
porque es contundente, alegre y no se deja de nadie. Además, insisto, juega con
alegría y contundencia, sin tanta bulla ni líos de técnicos ni de jugadores
indisciplinados, otrora historia ya superada como las gestas civiles de los
grandes pueblos y gremios. Eso lo está haciendo Comesaña y su gente, hay que
reconocerlo.

JUNIOR fue picante,
pícaro, notorio, curtido, aguerrido, claro, templado y sosegado, además de
inteligente porque supo dejar jugar al DIM y luego «matarlo» con una saeta
zurda de Acuña por la parte izquierda. Todo eso fue Junior, un equipo sin miedo
y que con enjundia, echao pa`lante, le
hizo juego al DIM, que se dejó enredar de un Tiburón caribeño sediento de un nuevo triunfo.

Junior fue un
equipo con argumentos más ofensivos que defensivos, un conjunto alegre y
contragolpeador cuando el DIM lo tuvo arrinconado, y se desarraigó por el
centro y por las puntas llegando siempre con peligro para reintegrarse y
quitarse de encima el bailoteo paisa. Teo despilfarró varios gritos de gol, y
Cici tenía la pólvora un tanto acuosa. Pero Giovanni -a pesar de que le dieron
pata-, no se rindió y lucró su casta
protagónica y orquestal para dirigir a una ofensiva goleadora costeña.

Aún me preocupa
la elástica defensiva del equipo, de tu papá. Valencia estuvo mejor que
Ceballos que creo fue el que perdió la bola para que se generara el gol del
DIM; Fawcett debe practicar los tiros de afuera del área, pero bien en defensa.
Romero estupendo, defiende y ataca. En los medios, Jaramillo y Rueda
descargando las marcas opuestas con matraca, fuerza y limpieza. Buen trabajo de
los guerreros volantes.

Y Cici,
Giovanni, Teo, junto al «perdido» de Yanez, excelentes, excepto este último. Ellos
fueron las estrellas de una noche calurosa de Barranquilla.

La diferencia numérica
tras la salida de Choronta le restó al DIM equilibrio y armonía; el Junior sin
pena y con coherencia sumó las armas que posee, con toque directo, precisión y definición
dada la decisión de Giova de resolver con un tirazo y en los límites del área
paisa, con un golazo de crack.

Un Junior que
hizo a un Medellín rezagado y mediotablero, que lo dejó en los bordes de los
ocho y tu padre, arriba, colgado de la punta por apenas unos centímetros dado
que el Tolima anda ahí… también entre los mejores.

Los paisas jugaron
fútbol con buen nivel, al estilo Escobar. Y Junior jugó con confianza y
técnica, un fút que sólo el tiburón
sabe.

 

P.D.: Hay un
periodismo ciego que debemos respetar dado que ven lo que no pasa en el terreno
de juego; debemos comprenderlos -a ellos-,  primero porque tienen todo el derecho de ver y
de decir lo que quieran… y segundo porque los resultados se muestran a la vista
como es el caso de Junior anoche en Barranquilla; esos ciegos por su condición
de minusválidos ópticos,