Hay partidos que se ganan brillando en el frente de ataque, hay otros
que se ganan desde el orden, siendo aplicados en defensa e inclusive
aguantando. Lo cierto es que un equipo serio y maduro debe estar en capacidad
de adaptarse a la situación de partido y ganar de cualquiera de estas dos
maneras. Santa Fe demostró en el clásico 271 que es un equipo serio.
 

Muy temprano en el juego, recuperación y pase de Omar Pérez a Martínez Borja,
el pase provocó el error rival y el autogol que daba la ventaja al León. Luego,
un clásico sin mayores emociones, algunos remates de media distancia y un Santa
Fe fuerte en defensa, que aprovechó la falta de claridad del rival y aguantó el
resultado.

Omar, la figura del encuentro. Provocó el autogol, siempre hizo la fácil, tuvo
sacrificio y con su manera de proteger el balón desesperó al rival. En el
segundo escalón, Camilo Vargas. Qué arquero tiene Santa Fe. Siempre seguro y
respondió espléndidamente en la opción más clara que tuvo el rival, la cual
llegó sólo en una desconcentración en el tiempo de reposición del segundo
tiempo. 

Para completar el podio, Gerardo Bedoya. Volvió a la titular y le hizo bien al
equipo. Santa Fe se vio más fuerte en marca y Torres tuvo un acompañante en esa
función. Otro par de jugadores que tuvieron un muy buen partido fueron Valdés y
Meza.

Una lástima otro discreto arbitraje. El juez Sánchez amonestó casi a todo el
equipo. Además, expulsó por doble amarilla a Roa (la primero no fue siquiera
falta) y complicó aún más el juego. Me pareció un árbitro acomodado y que no
midió de la misma forma al rival.

En fin, Santa Fe sin varios de sus habituales titulares como Arias, Valencia y
Wilder, con 10 jugadores varios minutos y sin mostrar lo mejor de su fútbol en
el frente de ataque, se llevó el clásico y tomó revancha de la fecha anterior
para asegurar de paso el liderato en la Liga con 20 puntos. Los clásicos no se
juegan, sólo se ganan. Frase trillada y perfecta para entender la importancia
del resultado.

Santa Fe cierra una semana redonda con victorias en Libertadores, Copa Postobón
y Liga. Además, para enmarcar la campaña, es líder en los tres torneos. Falta
muchísimo y los lideratos parciales no entregan títulos así que el equipo
tendrá que seguir con cabeza fría, sabiendo que cada partido es crucial.

El próximo partido será por Libertador este martes desde las 7:15 p.m. en el
Campín frente a Real Garcilaso. Ese juego tiene gran importancia pues definirá
el líder del grupo 6. Si Santa Fe defiende el liderato, ojalá ganando para
sumar una gran cantidad de puntos, asegura ser el segundo mejor primero de la
fase de grupos, enfrentar al segundo peor segundo y cerrar en casa la llave de
Octavos de Final. Clara motivación para salir por la victoria el martes y para
que la hinchada acompañe masivamente al equipo.

Disfrutemos este gran momento pero con tranquilidad. Sin triunfalismos. Nada
será fácil de aquí en adelante, los pies deben estar en la tierra y los
objetivos se deben conseguir paso a paso. Nos vemos el martes en el Campín.
¡Vamos León!


Saludos santafereños,


Por @jegonzalezj