Por: Jaime Esteban González
El miércoles por la noche en un
partido donde Santa Fe dejó el alma y el cuerpo en la cancha, el León venció
1-0 al Atlético Mineiro, pero quedó eliminado de la Copa Sudamericana al no
lograr remontar una desventaja de dos goles. Todo el equipo corrió, metió y
luchó, sin embargo la falta de gol y definición de nuestros delanteros salió
costosa y cuando más necesitábamos goles estos no llegaron.
El equipo formó con
Julio-Otálvaro-Valdés-J.González-Noguera-Torres-M.González-Anchico-Seijas-Rodas-Nazarit.
El matemático Otero se la jugó con el mismo conjunto que enfrentó al Junior el
domingo, teniendo en cuenta que Omar Pérez se resintió de su lesión de rodilla
y no pudo ser de la partida. En el primer tiempo Santa Fe arrancó mucho mejor
que como terminó. A los 10 minutos del primer tiempo un gol anotado por el
venezolano Seijas fue mal anulado por el línea de occidental. Error garrafal
que pudo haber cambiado la historia de la serie. Rodas tuvo el gol cerca en un
mano a mano frente al buen arquero rival que fue otro de los responsables de la
eliminación del rojo. Luego, Seijas en un contra golpe tuvo un acercamiento peligroso
al arco, pero la finalización de la jugada no fue la mejor. Así fue la primera
etapa, un Santa Fe que acorraló al equipo brasilero en varios pasajes, pero ese
ímpetu se fue apagando y así se acabó la primera mitad, sin un gol que empezará
a dar tranquilidad.
Para el segundo tiempo, el equipo
salió con toda en busca del gol. Había volumen de ataque, la idea de juego era
clara, se abrían las bandas tanto por derecha con el Checho, como por izquierda
con Noguera, pero nuevamente fallaba la puntada final. Al minuto 15 del segundo
tiempo, llegando con toque al área rival, Felix Noguera se inventó un golazo al
rematar con potencia y colocación y hacer delirar los cerca de 20.000
santafereños que presenciaron el partido. Faltaban 30 minutos y parecía que el
segundo gol debía llegar. Santa Fe se llenó de ansiedad, a veces pecó por la
individual, sin embargo siguió teniendo buenos acercamientos al arco rival pero sin lo más importante del
fútbol que es el gol. En la segunda etapa ingresaron Bernal, Palmira y Viáfara,
por Mario González, Rodas y Noguera. El matemático arriesgó en busca de la anotación
que empatara la serie, se dejaron espacios y apostamos al todo o nada debido a
algunos contragolpes que nos propinaron, pero que fueron bien resueltos por la
zaga defensiva o por Julio. Pero ese segundo gol por el que miles de hinchas
suspiramos hasta el último minuto nunca llegó.
El Mineiro colocó casi 10 hombres
en propia cancha, por lo que sus ataques se vieron en la segunda etapa producto
de contragolpes. Julio estuvo gigante, sobre todo en una jugada que pudo haber
sentenciado la serie con anticipación, pero que resolvió magistralmente. La
zaga defensiva estuvo sólida en los pocos arribos con peligro del Mineiro. El
Checho fue una salida constante desde el primer tiempo e inclusive en la
segunda etapa terminó de armador. Noguera estuvo firme en marca y aportó mucho
más en ataque en el segundo tiempo con salida y un golazo.
Daniel Torres, qué pedazo de
jugador. Metió y metió en todo el partido, recuperó balones, abrió la cancha, fue
socio en el medio. Mario fue el más flojo del equipo, arrancó con ganas, pero
no tuvo claridad ni físico. Bernal ingresó por él en la segunda etapa antes del
gol, y aportó dando volumen de ataque por izquierda. Anchico tuvo un buen partido.
Seijas se comió la cancha corriendo y luchando, le faltó algo de claridad ya
que tuvo la labor de armador, pero tuvo un buen partido. Nuevamente el punto
negativo fueron los delanteros, generaron espacios, arrastraron marcas,
generaron situaciones, pero fallaron en lo más importante para un jugador en su
posición: definir bien y anotar goles. Palmira y Viáfara frente a un equipo
cansado aportaron y generaron algunas acciones cerca del área. Pero finalmente
en un partido donde las figuras debían ser los delanteros, los tres mejores del juego fueron: Otálvaro, Torres y Noguera.
Al final,
ganar el partido no alcanzó para remontar la serie. Al término del encuentro un
aplauso de toda la hinchada fue el reconocimiento a los jugadores por dejar
todo en la cancha. El matemático Otero lo dijo en rueda de prensa, el fútbol no
regala nada y ayer nos cobró y duro esa falta de definición y tal vez el mal partido que
se hizo en Brasil en la ida. El problema de Santa Fe no fue de generación de
juego. Un equipo que crea 21 aproximaciones a gol, no puede anotar solamente un tanto.
También hay que remarcar el
pésimo arbitraje de toda la terna. El gol anulado es una jugada que pudo ser
determinante. El árbitro se dejó manejar el partido, los brasileros se tiraron
al piso muchas veces para hacer tiempo y una patada brutal sobre Noguera tuvo
que ser la segunda amarilla y roja para el defensa del Mineiro. En fin, el juez
no era el que tenía que marcar los goles por nosotros, pero el manejo del
partido y algunas decisiones afectaron el desarrollo del encuentro.
Omar Pérez hizo falta. Luisma Seijas
rinde mucho más jugando por izquierda en su posición natural y no como armador.
Qué lástima que en este partido definitivo Omar no estuviese. Pero ojo, si Omar
no tuviese el problema de rodilla que arrastra de varios años atrás, estoy
seguro no jugaría ni en Santa Fe ni en Colombia, estaría en una liga de mayor
peso. Por eso prefiero tener un jugador de su clase aguantándolo y llevándolo partido
a partido, que no tenerlo. Ha estado en la mayoria de juegos y sólo hasta ahora lo vemos resentido de la lesión. Siempre tiene algo para aportar. Esperemos que se recupere pronto para el final del
la Liga.
El golpe para el grupo es fuerte
desde el punto de vista económico dados los buenos premios de la Conmebol por
avanzar en cada fase. Ahora se necesita un trabajo motivacional del cuerpo técnico
para levantar el ánimo de los jugadores. La pelea por la estrella sigue ahí y
ahora tendremos un equipo totalmente concentrado en ese objetivo.
Nunca vamos a querer perder, pero
si toca escoger alguna, prefiero que sea así, con las botas puestas y
demostrando amor por la camiseta. A pesar de la tristeza que nos embarga, muchos
hoy más que nunca estamos orgullosos de ser santafereños. Ahora, ese orgullo
toca demostrarlo acompañando a Santa Fe en los dos partidos que faltan de local
en la fase todos contra todos y en los tres juegos de los cuadrangulares, donde todos esperamos se empiece a construir el camino a la final de la Liga.
Este domingo desde las 5:20 p.m. con
transmisión de TV por RCN, Santa Fe enfrentará a Cúcuta en la frontera por la
defensa del liderato. Los dejo con la frase de Agustin Julio por Twitter al
término del partido: «Esta vez no se pudo, pero pa’lante. La fe esta allí» y la
de German Centurión por el mismo medio «Dejaron la vida Leones!!!
Felicitaciones por haber dejado el alma en la cancha. Orgulloso de los
compañeros que tengo!!». Vamos León, la fe no se ha perdido y es un orgullo ser tu hincha!
Saludos santafereños,
*: Nos vemos en Twitter, otro espacio para compartir
opiniones del León y recibir sus comentarios. También pueden seguir a MiSantaFe, que trae siempre noticias e
información del equipo.